-El presidente de Chile Ricardo Lagos ha dejado abierta la posibilidad de tratar el tema de la delimitación marítima con el Perú. ¿Qué opinión tiene sobre este anuncio?-Es un paso muy importante y trascendental, porque desde hace más de 20 años el Perú ha buscado conversar sobre este tema sin encontrar una respuesta. Y lo es más porque no existe un tratado específico de límites marítimos con Chile.
-Pero ya existe un convenio con Chile y Ecuador, firmado en 1954, mediante el cual se habría delimitado la frontera marítima, aunque perjudicando al Perú…
-Lo importante es que no era un tratado bilateral de límites marítimos fronterizos, sino un acuerdo entre tres países.
-A partir de esta disposición queda un camino largo para iniciar la negociación con Chile. ¿Cuáles son los primeros pasos?
-Se debe iniciar el debate de la Convención del Mar para decidir la adhesión de nuestro país. Este tratado internacional contiene artículos muy importantes sobre la repartición igualitaria de territorio marítimo entre países adyacentes, a los cuales podemos acogernos para negociar con Chile.
EL PAPEL DE BOLIVIA
-La nueva postura chilena debe haber evaluado la presión del Perú para resolver el tema, además de que Bolivia está pidiendo una solución a su mediterraneidad.
-No es una posición gratuita: están considerando el aspecto geoestratégico y han llegado a la conclusión de que solos no pueden hacer nada. El Perú pide la delimitación marítima y, por su lado, Bolivia. Ellos han analizado que manteniendo una postura inflexible no van a lograr nada.
-Después de una negativa permanente, ¿cuáles son los intereses que estaría persiguiendo Chile al iniciar una negociación con el Perú sobre el límite marítimo?
-Busca obtener la disposición del Perú para que, a mediano plazo, nuestro país acepte la entrega a Bolivia de una franja territorial al norte de Arica (según el Tratado de 1929, nuestro país tiene que autorizar cualquier concesión de territorio a un tercer país). De esta forma, Chile queda bien con Bolivia, asegura la provisión de las aguas de Silala (que abastecen varias ciudades del norte de Chile), y logra que el gas de Tarija salga por su territorio.
-Pero la salida del gas de Tarija es también de interés para nuestro país. ¿Es conveniente para el Perú propiciar este eventual arreglo?
-Es una aspiración tanto para el Perú como para Chile. Ahora bien, las negociaciones por el gas se van a dar bilateralmente.
-¿Cuál debe ser la propuesta peruana para sentarse a conversar seriamente con Chile?
-Pienso que la propuesta debe basarse en establecer como límite de la frontera marítima la "línea media" entre Perú y Chile (diferente a la línea terrestre), tal como lo establece el artículo 15 de la Convención del Mar. Además debe resaltarse que no existe un tratado bilateral de demarcación marítima entre nuestros países.
70 MIL KILÓMETROS CUADRADOS
-Lo que se busca es una repartición igualitaria del espacio marítimo. En términos reales, ¿qué obtiene el Perú?
-Si se establece la "línea media", son dos áreas sobre el océano: una de 35 mil kilómetros cuadrados y la otra, formada por un triángulo adicional, de más 32 mil kilómetros cuadrados. En total son como 70 mil kilómetros cuadrados, los cuales equivalen al territorio que perdimos con Tarapacá y Arica. Esta zona es muy rica en recursos minerales, y existen nódulos de manganeso que pueden ser explotados con el tiempo.
-¿La Cancillería viene preparando una estrategia para tratar este tema?
-El ministro Manuel Rodríguez Cuadros viene elaborando una propuesta seria para conversar con Chile. Tengo entendido que además de oficiales marinos especialistas en el tema se ha convocado a abogados especialistas en derecho internacional, y se están viendo los aspectos jurídicos y legales para sustentar la demanda peruana.
-Si existe una apertura de Chile, ¿el Perú, de acuerdo con el Tratado de 1929, podría plantear otros asuntos pendientes que mantiene con ese país?
-Este tema tiene también que ponerse en la agenda bilateral entre los dos países.
Publicado en el diario LA REPÚBLICA, fecha 8 de marzo de 2004
-Se debe iniciar el debate de la Convención del Mar para decidir la adhesión de nuestro país. Este tratado internacional contiene artículos muy importantes sobre la repartición igualitaria de territorio marítimo entre países adyacentes, a los cuales podemos acogernos para negociar con Chile.
EL PAPEL DE BOLIVIA
-La nueva postura chilena debe haber evaluado la presión del Perú para resolver el tema, además de que Bolivia está pidiendo una solución a su mediterraneidad.
-No es una posición gratuita: están considerando el aspecto geoestratégico y han llegado a la conclusión de que solos no pueden hacer nada. El Perú pide la delimitación marítima y, por su lado, Bolivia. Ellos han analizado que manteniendo una postura inflexible no van a lograr nada.
-Después de una negativa permanente, ¿cuáles son los intereses que estaría persiguiendo Chile al iniciar una negociación con el Perú sobre el límite marítimo?
-Busca obtener la disposición del Perú para que, a mediano plazo, nuestro país acepte la entrega a Bolivia de una franja territorial al norte de Arica (según el Tratado de 1929, nuestro país tiene que autorizar cualquier concesión de territorio a un tercer país). De esta forma, Chile queda bien con Bolivia, asegura la provisión de las aguas de Silala (que abastecen varias ciudades del norte de Chile), y logra que el gas de Tarija salga por su territorio.
-Pero la salida del gas de Tarija es también de interés para nuestro país. ¿Es conveniente para el Perú propiciar este eventual arreglo?
-Es una aspiración tanto para el Perú como para Chile. Ahora bien, las negociaciones por el gas se van a dar bilateralmente.
-¿Cuál debe ser la propuesta peruana para sentarse a conversar seriamente con Chile?
-Pienso que la propuesta debe basarse en establecer como límite de la frontera marítima la "línea media" entre Perú y Chile (diferente a la línea terrestre), tal como lo establece el artículo 15 de la Convención del Mar. Además debe resaltarse que no existe un tratado bilateral de demarcación marítima entre nuestros países.
70 MIL KILÓMETROS CUADRADOS
-Lo que se busca es una repartición igualitaria del espacio marítimo. En términos reales, ¿qué obtiene el Perú?
-Si se establece la "línea media", son dos áreas sobre el océano: una de 35 mil kilómetros cuadrados y la otra, formada por un triángulo adicional, de más 32 mil kilómetros cuadrados. En total son como 70 mil kilómetros cuadrados, los cuales equivalen al territorio que perdimos con Tarapacá y Arica. Esta zona es muy rica en recursos minerales, y existen nódulos de manganeso que pueden ser explotados con el tiempo.
-¿La Cancillería viene preparando una estrategia para tratar este tema?
-El ministro Manuel Rodríguez Cuadros viene elaborando una propuesta seria para conversar con Chile. Tengo entendido que además de oficiales marinos especialistas en el tema se ha convocado a abogados especialistas en derecho internacional, y se están viendo los aspectos jurídicos y legales para sustentar la demanda peruana.
-Si existe una apertura de Chile, ¿el Perú, de acuerdo con el Tratado de 1929, podría plantear otros asuntos pendientes que mantiene con ese país?
-Este tema tiene también que ponerse en la agenda bilateral entre los dos países.
Publicado en el diario LA REPÚBLICA, fecha 8 de marzo de 2004
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