Entre el 14 y el 16 de setiembre de este año se realizará en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York la Cumbre Mundial 2005 de la ONU con la presencia de aproximadamente 175 jefes de Estado o de gobierno y con la finalidad de revisar la aplicación de la Declaración del Milenio de 2000.
Recordemos que entre el 6 y el 8 de setiembre de 2000, en los albores de este nuevo milenio, los jefes de Estado y de Gobierno se reunieron en la sede de las Naciones Unidas aprobando, por resolución de la Asamblea General, la denominada Declaración del Milenio, en la cual se consideraron ciertos valores fundamentales como esenciales para las relaciones internacionales en el siglo XXI, entre ellos, la libertad, la igualdad, la solidaridad, la tolerancia, el respeto a la naturaleza y la responsabilidad común, formulándose, sobre la base de estos, una serie de objetivos con el fin de lograrse a nivel mundial la paz, la seguridad y el desarme; el desarrollo y la erradicación de la pobreza; la protección de nuestro entorno común; derechos humanos, democracia y buen gobierno; protección de las personas vulnerables; atención a las necesidades especiales de África así como el fortalecimiento de las Naciones Unidas. Por lo tanto, en esta Cumbre Mundial 2005 se revisarán y discutirán los avances conseguidos con respecto a dichos Objetivos y Metas de Desarrollo del Milenio, los cuales apuntan principalmente al logro, en el 2015, de la reducción del 50% de la pobreza mundial y al acceso a la educación primaria en todo el mundo.
En este sentido, el 21 de marzo de este año, seis meses antes de la cumbre y con la finalidad que los 191 Estados miembros de la ONU tengan suficiente tiempo para analizarlo, el secretario general Kofi Annan presentó un informe titulado: “Un concepto más amplio de la libertad: desarrollo, seguridad y derechos humanos para todos”, en el que presenta propuestas para fortalecer los Estados y permitirles servir mejor a sus pueblos trabajando juntos sobre la base de principios y prioridades compartidos.
Entre las más importantes se propone a los Estados miembros a colaborar para evitar las amenazas a la paz y la seguridad como el terrorismo, las armas de destrucción masiva, la delincuencia organizada, los disturbios civiles, la pobreza, las enfermedades infecciosas mortales y la degradación del medio ambiente; considerar en sus estrategias nacionales la igualdad entre los géneros, el medio ambiente, el desarrollo rural, el desarrollo urbano, los sistemas de salud, la educación, la ciencia y tecnología y la innovación.
Además de asumir el principio de la "responsabilidad de proteger", como base para la acción colectiva contra el genocidio, la depuración étnica y los crímenes de lesa humanidad; a los países desarrollados les propone comprometerse a alcanzar, a más tardar en 2015, el objetivo de dedicar el 0.7% de su producto interior bruto a la asistencia oficial para el desarrollo, así como adelantos científicos e innovaciones tecnológicas a fin de crear instrumentos para paliar el cambio climático, además del alivio de las deudas externas.
Un mundo donde actualmente más de 1,000 millones de personas (1 de cada 6 seres humanos) subsisten con menos de 1 dólar al día y carecen de los mínimos medios para sobrevivir frente al hambre crónica, las enfermedades y los riesgos ambientales; un mundo donde todos los años mueren 11 millones de niños antes de cumplir los 5 años y 3 millones de personas mueren a causa del sida, requiere de que en la Cumbre Mundial 2005 de la ONU se tomen decisiones urgentes y trascendentales donde prevalezca la cooperación y solidaridad extensa, profunda y sostenida a nivel mundial entre los Estados. ¿Estarán los alrededor de 175 jefes de Estado o de gobierno que asistan a esta cumbre mundial a la altura de las circunstancias?
Publicado en el diario EXPRESO, fecha 12 de setiembre de 2005
Recordemos que entre el 6 y el 8 de setiembre de 2000, en los albores de este nuevo milenio, los jefes de Estado y de Gobierno se reunieron en la sede de las Naciones Unidas aprobando, por resolución de la Asamblea General, la denominada Declaración del Milenio, en la cual se consideraron ciertos valores fundamentales como esenciales para las relaciones internacionales en el siglo XXI, entre ellos, la libertad, la igualdad, la solidaridad, la tolerancia, el respeto a la naturaleza y la responsabilidad común, formulándose, sobre la base de estos, una serie de objetivos con el fin de lograrse a nivel mundial la paz, la seguridad y el desarme; el desarrollo y la erradicación de la pobreza; la protección de nuestro entorno común; derechos humanos, democracia y buen gobierno; protección de las personas vulnerables; atención a las necesidades especiales de África así como el fortalecimiento de las Naciones Unidas. Por lo tanto, en esta Cumbre Mundial 2005 se revisarán y discutirán los avances conseguidos con respecto a dichos Objetivos y Metas de Desarrollo del Milenio, los cuales apuntan principalmente al logro, en el 2015, de la reducción del 50% de la pobreza mundial y al acceso a la educación primaria en todo el mundo.
En este sentido, el 21 de marzo de este año, seis meses antes de la cumbre y con la finalidad que los 191 Estados miembros de la ONU tengan suficiente tiempo para analizarlo, el secretario general Kofi Annan presentó un informe titulado: “Un concepto más amplio de la libertad: desarrollo, seguridad y derechos humanos para todos”, en el que presenta propuestas para fortalecer los Estados y permitirles servir mejor a sus pueblos trabajando juntos sobre la base de principios y prioridades compartidos.
Entre las más importantes se propone a los Estados miembros a colaborar para evitar las amenazas a la paz y la seguridad como el terrorismo, las armas de destrucción masiva, la delincuencia organizada, los disturbios civiles, la pobreza, las enfermedades infecciosas mortales y la degradación del medio ambiente; considerar en sus estrategias nacionales la igualdad entre los géneros, el medio ambiente, el desarrollo rural, el desarrollo urbano, los sistemas de salud, la educación, la ciencia y tecnología y la innovación.
Además de asumir el principio de la "responsabilidad de proteger", como base para la acción colectiva contra el genocidio, la depuración étnica y los crímenes de lesa humanidad; a los países desarrollados les propone comprometerse a alcanzar, a más tardar en 2015, el objetivo de dedicar el 0.7% de su producto interior bruto a la asistencia oficial para el desarrollo, así como adelantos científicos e innovaciones tecnológicas a fin de crear instrumentos para paliar el cambio climático, además del alivio de las deudas externas.
Un mundo donde actualmente más de 1,000 millones de personas (1 de cada 6 seres humanos) subsisten con menos de 1 dólar al día y carecen de los mínimos medios para sobrevivir frente al hambre crónica, las enfermedades y los riesgos ambientales; un mundo donde todos los años mueren 11 millones de niños antes de cumplir los 5 años y 3 millones de personas mueren a causa del sida, requiere de que en la Cumbre Mundial 2005 de la ONU se tomen decisiones urgentes y trascendentales donde prevalezca la cooperación y solidaridad extensa, profunda y sostenida a nivel mundial entre los Estados. ¿Estarán los alrededor de 175 jefes de Estado o de gobierno que asistan a esta cumbre mundial a la altura de las circunstancias?
Publicado en el diario EXPRESO, fecha 12 de setiembre de 2005