El
pasado día 10 se inició el año escolar 2014 en los colegios públicos de nuestro
país. El ministro de Educación, Jaime Saavedra, inauguró el inicio de clases desde
el colegio “Víctor Andrés Belaúnde” de Ventanilla, todo muy bien presentado,
previo examen médico y desayuno de Qali Warma a los alumnos. Sin embargo –tal
como presentó un canal de televisión– en otro colegio “Divino Creador” de la
misma zona, 700 alumnos iniciaban clases –sin desayuno ni examen médico– en su
precario local con aberturas en los techos, peligrosas conexiones eléctricas y baños
en mal estado.
Según
el Ministerio de Educación solo 2,733 colegios no iniciaron clases (de 49,106 a
nivel nacional), sin embargo, la situación de infraestructura de una gran
mayoría en el país es deplorable. Tenemos algunos ejemplos: en Lambayeque 50%
presentan deficiencias estructurales; en Ayacucho 65% están en malas
condiciones; en la Región Áncash 60% requiere trabajos urgentes; en Huancayo
muchos colegios usan aulas prefabricadas; en Lima 40% necesita reparaciones; en
Cusco muchos alumnos estudian en módulos; en Arequipa e Ica no reconstruyen los
colegios afectados por terremotos; en Junín 300 colegios tienen serios
problemas de infraestructura; en Huancavelica 200 están afectados por derrumbes;
en Piura 340 presentan deficiencias.
Pero
en zonas rurales más pobres y alejadas –según la Defensoría del Pueblo– el 90%
de escuelas presenta graves condiciones de infraestructura, el mobiliario es
prácticamente inexistente y la salubridad inadecuada (usan silos, y agua de
pozos, ríos o acequias). Es inaceptable la abismal diferencia en
infraestructura de colegios de zonas rurales (33,317) –más del doble– respecto
a zonas urbanas (15,789).
Bajo
este panorama, el Ministerio de Educación estima –de manera inadmisible– que
mejorar la infraestructura de los colegios tomará por lo menos 10 años. Además,
extemporáneamente –a un mes del inicio de clases– asignó S/.280 millones para mantenimiento
preventivo de 49,106 colegios públicos (muchos no han podido acceder) siendo el
monto insignificante para los gastos requeridos, si comparamos los S/.470
millones gastados por el gobierno en 2013 para publicidad e imagen, de los
cuales el sector educación usó S/.150 millones.
Pese
a la caótica situación de la educación nacional la gestión de este sector es
pésima en ejecución del presupuesto; el 2013 quedó último de los 19 ministerios
(el 2012 penúltimo) por ejecutar menos de la mitad (45,8%) del presupuesto para
inversiones del Poder Ejecutivo.
Artículo
de Alfredo Palacios Dongo publicado en el diario EXPRESO, fecha 15 de marzo de
2014