El
pasado día 1° la Comisión de Comercio Exterior y Turismo del Congreso –con
asistencia de la ministra de Comercio Exterior y Turismo Magaly Silva, y la
jefa de la SUNAT– trató, entre otros temas, sobre el tráfico ilegal de
camélidos peruanos a Europa. Días antes (29 de agosto) el presidente de dicha
comisión, Renzo Reggiardo, manifestó que nuestros camélidos son enviados por
contrabando a Chile por US$ 100 y a su vez ese país los vendía a Europa por US$
200,000.
Al
día siguiente la ministra Silva –sin mencionar el asunto del contrabando– propuso
la creación de “ProCamélidos” para protegerlos, y que trabajaría paralelo al
lanzamiento de “Marca Alpaca Perú”. Coincidentemente, Nadine Heredia, durante el
IV festival de Camélidos Peruanos (30 de agosto) en Kunturkanki, Cusco, anunció
la implementación de un centro de Innovación Tecnológico Textil-Camélidos.
Proyectos
y promesas, pero la situación de nuestros camélidos, riqueza natural desde
tiempos ancestrales, lamentablemente está relegada. En las zonas alto andinas
sobre 3,800 msnm –con ecosistemas frágiles y vulnerables– tenemos especies
domésticas: llamas (750,000) y alpacas (3’600,000), y especies silvestres:
vicuñas (260,000) y guanacos (4,000), que representan una importante opción de
desarrollo para unas 800 comunidades –con pocas opciones viables y sostenibles–
dedicadas a su crianza.
Sin
embargo, no tenemos estrategias para controlar su contrabando en pie (solo una
Comisión Multisectorial creada hace 10 años con DS 043-2004 AG que poco
funciona). Chile, sin tener cantidad ni calidad es principal exportador de
alpacas en pie a Europa utilizando nuestros camélidos que salen de contrabando
desde Puno atravesando Bolivia (oficialmente entre 1995 y 2005 salieron
ilegalmente 40,000 alpacas). También es muy alta la mortalidad de camélidos por
falta de asistencia veterinaria, mal manejo reproductivo, enfermedades
infecciosas y parasitarias, friaje, caza furtiva, depredación por pumas y
zorros, etc.
No
contamos con un Plan Nacional de Camélidos (anunciado hace 2 años por el ex ministro
de Agricultura Milton von Hesse) ni adecuadas políticas, estrategias y programas
de capacitación a campesinos para su manejo, conservación, promoción y
comercialización.
Tampoco
se promociona la investigación sobre producción y desarrollo para su
mejoramiento genético, sin embargo, desde fines de los 80, EEUU, Australia,
Nueva Zelanda y Canadá, sin ser países de origen de estas especies han accedido
al recurso genético y tienen grandes poblaciones de camélidos sometidas a
crianza altamente tecnificada e intensivos programas de mejoramiento genético.
Artículo
de Alfredo Palacios Dongo publicado en el diario EXPRESO, fecha 13 de setiembre
de 2014