En la ciudad del
Cusco, declarada por la UNESCO (1983) patrimonio de la humanidad, se construye,
en pleno Centro Histórico y cerca de la Plaza Mayor, el Hotel Four Points by
Sheraton (US$ 30 millones de inversión, 7 pisos, 3 sótanos, 145 habitaciones), que
según Edwin Ruiz Caro, ex Director (dic.2013-dic.2015) de la Dirección
Desconcentrada de Cultura del Cusco (DDCC), se ha autorizado esta enorme
construcción (permitido solo 2 pisos) con planos modificados o alterados que vulnera
la tipología arquitectónica, trasgrede el Plan Maestro, el Código Municipal de
protección y el Reglamento de Edificaciones.
La historia
empieza en 2010 cuando, increíblemente, el ex titular de la DDCC, Juan García
Rivas, aprobó el proyecto original de 10 pisos. En agosto 2013 el alcalde, Luis
Flores García, otorgó licencia por 7 pisos a la empresa R&G SAC, y el 29
diciembre 2014 (a 2 días de dejar el cargo) la amplió 3 años más. El nuevo
alcalde a partir del 2 enero 2015, Carlos Moscoso Perea, presentó el 25 julio
2015 una demanda al Poder Judicial para anular dicha licencia, quien conjuntamente
con el DDCC Edwin Ruiz Caro conformaron una comisión Ad Hoc que detectó faltas administrativas
y patrimoniales, declarando la alcaldía nula la licencia y paralizando las obras
(Resolución 882-29 dic.2015).
Sin embargo, el
pasado 20 de julio, la Corte Superior de Justicia del Cusco declaró fundada la
acción de amparo de la constructora R&G SAC dejando sin efecto la Resolución
Municipal 882-29 porque ésta no notificó dicha nulidad a la empresa, lo cual ha
causado gran preocupación al Ministerio de Cultura que ha iniciado un
procedimiento administrativo sancionador contra la constructora por vulneración
de la Ley 28296 (Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación), y también a
la UNESCO por potenciales impactos negativos de esta construcción, finalmente,
el pasado día 10, la DDCC a cargo de Daniel Maravi Vega-Centeno, paralizó
nuevamente las obras (Resolución 171-2016).
Bajo este
panorama, la inversión e infraestructura hotelera es positiva y necesaria para
nuestro país, sin embargo, esta construcción en el Centro Histórico con
indicios de irregularidades para conseguir licencia, debe ser demolida o
adecuarse estrictamente el Plan Maestro, además, debe sancionarse con
rigurosidad los malos funcionarios ediles y culturales que ocasionaron el indebido
avance (61%) de este proyecto que atenta y pone en riesgo la condición de la
Ciudad Imperial del Cusco como Patrimonio Mundial.
Artículo de Alfredo
Palacios Dongo publicado en el diario EXPRESO, fecha 20 de agosto de 2016