Durante la Conferencia sobre Cambio Climático
COP-24 (Polonia, diciembre 2018) la Organización de Naciones Unidas para la Educación,
Ciencia y Cultura (Unesco) presentó su último informe “El impacto del retroceso
de los glaciares sobre los recursos hídricos” (Atlas de Glaciares y Aguas Andinos)
señalando que en los glaciares de los Andes Tropicales (que cruzan Perú,
Colombia, Venezuela, Ecuador y Bolivia) la situación es dramática porque si continúa
incrementando la temperatura al ritmo actual podrían perder entre 78% y 97% de
su volumen glaciar hacia finales del siglo, en esta zona la temperatura promedio anual creció 0.8°C durante el siglo XX y antes que termine
el siglo XXI podría aumentar entre 2°C y 5°C lo cual generaría un grave
problema de falta de agua ya que la reducción o desaparición de dichas masas
glaciares afectan la capacidad de su almacenamiento.
Sobre la situación en Perú, Unesco, a
través de fotografías aéreas ha determinado que desde 1970 los 722 glaciares de
la Cordillera Blanca redujeron su superficie de 723.4 km2 a 600 km2. Según investigaciones científicas el hielo de nuestros
glaciares tardaron 1,600 años en formarse y en los últimos 25 años se ha perdido
gran masa glaciar debido al aumento de temperatura por el cambio climático que
ha roto el equilibrio natural. En el Perú tenemos
2,700 glaciares andinos en 19
cordilleras (más del 70% del total mundial), hace 50 años cubrían unos 2,000 km2 habiéndose reducido
actualmente a menos de 1,300 km2.
Bajo este
panorama según un informe del Centro de Investigación Tyndall Center de Inglaterra,
somos el tercer país más vulnerable al cambio climático después de Bangladesh y
Honduras. Con mucho retraso, hace 6
años, se estableció un proyecto regional Perú, Bolivia y Ecuador “Adaptación al
Impacto del Retroceso Acelerado de los Glaciares en los Andes Tropicales” lo
que no ha apaciguado esta problemática, el año pasado el Ministerio del
Ambiente inició el desarrollo de un proyecto sobre gestión del riesgo y uso del
agua de glaciares, pero lo que se requiere es una estrategia completa que
fortalezca los ecosistemas de los andes, mejore el manejo de los recursos
hídricos con una buena gestión así como el almacenamiento natural del agua de
los glaciares, que prevenga de desbordes el agua represada en las lagunas, adecue
la agricultura al cambio climático, y genere conciencia a las poblaciones sobre
las políticas de mitigación a los impactos del calentamiento global.
Artículo
de Alfredo Palacios Dongo publicado en el diario EXPRESO, FECHA 26 de enero de 2019