El impresentable ex presidente boliviano Morales, fue
el primero en felicitar al comunista Castillo al ganar en unas turbias
elecciones manifestando que “se trata de un triunfo de la dignidad sobre el
neoliberalismo”. Con anuencia de Castillo y Cerrón, este intruso que se
inmiscuye en nuestros asuntos internos tiene una nefasta semblanza política en
Bolivia, gobernó desde 2006 y promovió la Asamblea Constituyente, cambió la
Constitución (entró en vigencia desde 2009) aprobando la reelección,
usándola para reelegirse dos períodos
(2009 y 2014) y en 2016 promovió un referéndum para reelegirse nuevamente, el
“No” ganó con 51.3% imposibilitándole postular en 2019, aún así, lo hizo
contraviniendo la ley, sin embargo, fue obligado a dimitir acusado de manipular
flagrantemente los comicios, hecho que la OEA calificó como “las peores
elecciones de la última década” y como “vergüenza hemisférica”.
El intruso Morales se
ha reunido con cocaleros del Vraem azuzándolos para que se elimine la erradicación y se relance
la hoja de coca, asegurando que en
Bolivia “sin presencia de Estados Unidos y sus bases militares estamos mejor en
la lucha contra el narcotráfico”, hasta ha tenido el desparpajo de plantear un
“Consejo Andino de la Coca”, como una estrategia que servirá para “hacer la
revolución democrática en el Perú”.
También se ha reunido
con profesores de Fenate Perú, gremio fundado por Castillo (nueva fachada de
Conare-Movadef), diciéndoles que “el imperialismo y capitalismo no permiten
atender las demandas sociales, además, promueven el fascismo y racismo, y
organizan golpes de Estado”, manifestó que la política económica se basa en la
nacionalización de recursos naturales y servicios básicos. En una reunión con
dirigentes campesinos acordó realizar un evento internacional para defender el
gobierno de Castillo. Y en Arequipa, alentó a los jóvenes a encabezar la
Asamblea Constituyente.
Bajo este panorama no debemos
permitir que el intruso Morales interfiera y se inmiscuya en nuestra política
interna y trate de concretar los fines de movimientos radicales para añadir al
Perú a la lista de países con ideología bolivariana, además, es inaudito que impulse
una Asamblea Constituyente y promueva políticas que favorecen al narcotráfico. Actualmente,
según informe televisivo (Panorama), Morales y sus seguidores, están realizando
en el Cusco trabajos de ideologización y hasta promueven la designación del
boliviano Máximo LLasaca como cónsul en la región Cusco. Lo increíble es que el
pasado 20 de agosto, el Congreso rechazó el pedido de la congresista Yarrow
para declarar a Evo Morales “persona no grata”, y es que todavía no toman
conciencia del peligro que representa este sujeto para nuestro país.
Artículo
de Alfredo Palacios Dongo publicado en ediario EXPRESO, fecha 23 octubre de
2021