Durante el foro internacional “la crisis de la
educación latinoamericana en el marco del capitalismo neoliberal” realizado del
10 a 12 de mayo 2018 en La Paz, Bolivia, asistieron como integrantes del Sute
Conare-Movadef, Pedro Castillo, César Tito y Edgar Tello, al concluir su
discurso se aprecia en un video presentado por la Dirección Nacional contra el Terrorismo
(Dircote), al comunista Castillo con el brazo levantado arengando: “Mar para
Bolivia, mar para Bolivia”. Después de 6 meses de gobierno y durante una
entrevista el 25 de febrero a la cadena CNN en español, el comunista Castillo, con
supina ignorancia sobre el significado de soberanía territorial, increíblemente
expresó públicamente su intención de consultar al pueblo para otorgarle mar a
Bolivia, manifestando irresponsablemente “ese es su derecho, haremos lo que los
pueblos claman, necesitan o quieren, no solo hay que abrir fronteras, hay que
vivirlas”.
Todas
éstas nefastas, infames e irresponsables declaraciones contravienen y vulneran
nuestra Constitución en los artículos: 32° -No pueden someterse a referéndum
los tratados internacionales en vigor; 44°-Es deber primordial del Estado
defender la soberanía nacional; 54°-El territorio del Estado es inalienable e
inviolable; 56°-Los tratados sobre soberanía, dominio o integridad del Estado
deben ser aprobados por el Congreso antes de su ratificación por el presidente.
Una
semana después, el comunista Castillo se arrepiente de sus expresiones y pide
perdón al pueblo peruano, pero tratándose de quien personifica la Nación y
pretende entregar soberanía marítima a Bolivia, asunto absolutamente sensible
sobre la integridad de nuestra República,
representan una grave ofensa a todos los peruanos y lindan con una grave
traición a la patria, por tal motivo, el pueblo jamás perdonará su nefasta
disposición muy clara y antigua de entregar mar a Bolivia, el comunista
marxista leninista Castillo ha demostrado no tener visión de Estado ni un
enfoque claro de nuestro país, personificando la Nación no medir las
consecuencias y trascendencia de sus declaraciones, además de absoluta falta de
control emocional.
Bajo este panorama hace 30 años (en 1992), le cedimos a Bolivia en Ilo, por 99 años, una zona franca de 163 hectáreas (1’630,000 m2) para tránsito libre de su comercio exterior, incluyendo 5 km de litoral, que debió convertirse en importante zona de desarrollo comercial y turística, pero actualmente continúa absolutamente abandonada, porque lo que busca Bolivia es “soberanía” en dicha zona para tener buques de guerra y construir su escuela naval para 250 efectivos, y eso es lo que quiere lograr ese país con apoyo del gobierno comunista de Castillo, quien si lograra cambiar nuestra Constitución podría concretar la entrega de soberanía marítima a Bolivia.
Artículo de Alfredo Palacios Dongo publicado en
el diario EXPRESO, fecha 5 de febrero de 2022