El
vacado comunista Castillo dejo una bomba de tiempo en el Vraem, durante las
elecciones, en sus 69 distritos obtuvo casi 100% de votos, y, como compensación,
prometió a los cocaleros liberar la zona de erradicación, para cumplir, nombró
en noviembre 2021 a Ricardo Soberón como presidente de la Comisión Nacional
para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) por su ideología de rechazó a la
erradicación de cultivos ilegales implementando en marzo 2022 un “Pacto Social
Ciudadano” con los cocaleros para que erradiquen sus cultivos “de forma
voluntaria, gradual y verificable”, algo imposible de concretarse. Donde se
procesa 70% de coca producida en el país no se erradica una sola hectárea.
Ha pasado un mes desde
que Dina Boluarte asumió el gobierno transitorio y no ha mencionado una sola
palabra sobre política antidrogas, esta omisión es muy preocupante porque el
premier Alberto Otárola conoce la peligrosa situación del Vraem ya que entre
mayo 2014 y setiembre 2016 fue presidente de Devida, y aseguraba que todo el
proceso de hoja de coca en el Vraem se transforma en cocaína debiendo realizarse
una erradicación eficiente con objetivos consolidados. Esperamos que, durante
el pedido del voto de confianza en el Congreso, el martes 10, explique la
política antidrogas.
La no erradicación en
el Vraem está consolidando dicha zona como ideal para narcotraficantes operando
en complicidad con terroristas de Sendero Luminoso, convirtiéndose en la
principal amenaza a la seguridad nacional. Entre 2020 y 2021, a nivel nacional,
se produjo un impresionante incremento de cultivos de coca (de 61,777 hectáreas
anuales a 80,681), y producción de cocaína (de 527 a 810 toneladas), sin
erradicación en el Vraem se estima que entre 2022 y 2023 podría registrarse
100,000 hectáreas de cultivos de coca y 1,000 toneladas de producción de
cocaína, y hasta podríamos superar a Colombia como primer país productor, lo
cual sería gravísimo.
En marzo 2022, Otárola,
como miembro de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes
(JIFE), cuestionó duramente a Soberón: “No puede pactar ningún acuerdo
con representantes de los cocaleros que entregan su coca al narcotráfico bajo
la presunción que se van a autoerradicar. Eso es una ilusión”, añadiendo:
“la política antidrogas debe
estar en la agenda del presidente de la República. No
solo no se entiende el problema, sino que se tienden puentes con cocaleros ilegales”.
Bajo este panorama, el
premier Otárola, por sus duros cuestionamientos contra Soberón, debe destituirlo
del cargo. En este sentido, en el Vraem se requiere implementar una estrategia
integral con políticas de desarrollo social y económico sostenibles, donde la
erradicación sea un componente indispensable de una estrategia integral.
Artículo de Alfredo
Palacios Dongo publicado en el diario EXPRESO, fecha 7 de enero de 2023