La
calificadora de riesgo crediticio Standard & Poor´s Global Ratings
(S&P), el 15 de marzo pasado, redujo la calificación de deudas de largo
plazo de Petroperú de BBB- a BB (siglas BB, B, CCC, CC y C califican deudas
como bonos especulativos o basura), además cambiaron su perspectiva de estable
a negativa, que ocasionarán dificultades para conseguir financiamiento y con elevadas
tasas de interés. Nuevamente, el pasado día 13, volvió a disminuir la
calificación de BB a B+ como emisor de deuda a largo plazo, reduciendo además
su perfil de crédito independiente de B- a CCC+ por mayor riesgo de sus bonos, S&P
explicó que esta nueva reducción se debe a la débil estructura de su capital, limitado
desempeño que ocasionaron mayores deudas, mala situación económica financiera,
y que no podrán cubrir los flujos de efectivo de la Refinería de Talara en 2024-2025,
cuyo costo, según estados financieros de Petroperú sobrepasaron
los US$ 6,000 millones (quintuplicando los US$ 1,200 millones proyectados inicialmente
en 2012).
La
ineficacia y mala gestión de Petroperú es muy preocupante, escandalosamente, al
cierre de setiembre tiene una pérdida neta de US$ -530 millones y un
déficit de capital de trabajo de US$ -1,528 millones, increíblemente ha
ido pidiendo al gobierno no devolver el préstamo recibido en mayo 2022 (US$ 750
millones), facilidades de documentos cancelatorios (US$ 500 millones), y un aporte
de capital y de endeudamiento de garantía de S/ 5,573 millones (equivalente a
US$ 1,500 millones) recibidos según DU-023-2022 (25 octubre 2022).
De
acuerdo a las disposiciones de dicho DU, para garantizar la sostenibilidad de
Petroperú, esta empresa tenía como máximo plazo hasta el 25 de setiembre 2023
para realizar las acciones del “Plan de Fortalecimiento”, entre ellas, su
reorganización administrativa, modificar su estatuto social e instrumentos
societarios para reforzar los principios de buen gobierno acorde a lineamientos
de Fonafe, asimismo, hasta el 25 de octubre 2023, para presentar la
valorización de la empresa y acciones para una oferta pública en el marco de la
ley 30130 sobre la Refinería de Talara.
Bajo
este panorama, las preguntas serían: 1) ¿Ha cumplido Petroperú con dicho “Plan
de Fortalecimiento”?; 2) A pesar que Petroperú se ha convertido en una empresa
estatal no sostenible por su mala gestión, ineficacia y pésima situación
financiera ¿Podrá mejorar la producción de petróleo en los lotes que le fueran
adjudicados sin concurso público, en la selva (192), y en Talara (I, VI y Z-2B)?,
considerando que actualmente producimos 40,000 barriles diarios (bdp) y
requerimos 250,000 bdp; y, 3) Después de haber gastado US$ 6,000 millones (de
todos los peruanos) en la Refinería de Talara ¿continuaremos importando 200,000
bpd de Ecuador y Colombia?.
Artículo
de Alfredo Palacios Dongo publicado en el diario EXPRESO, fecha 4 de noviembre
de 2023